lunes, 18 de agosto de 2014

ATRAPADA Primera parte


ATRAPADA
-¿Estás segura?- pregunto el hombre, cuando ella intentaba abrir la puerta.
-¡Por supuesto! esta es mi casa, y ella tiene que entender.
-Sabes que no lo hará! es muy necia, no quiere saber nada con nuestra boda y mucho menos que vengas conmigo a Europa.
-¡Pero es mi madre!, y debo verla aunque sea por última vez.
Al ingresar a la casa notaron un extraño silencio, no se la veía en el living como solía estar, fueron a su dormitorio y tampoco estaba allí, ni a la empleada se la escuchaba deambular, pese a que la llamaron varias veces, nunca apareció.
Continuaron revisando toda la casa que por cierto era demasiado grande, hasta que finalmente al ingresar a la biblioteca, notaron todo desordenado y una mancha de sangre en la alfombra.
Informaron a las autoridades quienes dieron por desaparecida a la mujer, y quizás, podría estar muerta.
Comenzó allí el tormento para la joven, no hubo día que no buscara a su madre. Los investigadores agotaron todas las hipótesis y llegaron a estar desconcertados, dado que había detalles en la investigación que no cerraban. Ella se sentía culpable porque en los últimos tiempos no se hablaban, debido a que su madre no aceptaba perder a su dulce niña, por un matrimonio que la llevaría muy lejos.
Su novio se marcho a Europa porque de allí lo reclamaban en su trabajo y ella continuo la búsqueda.
Pasó demasiado tiempo, cómo para quedarse encerrada dentro de una historia en la que ya nada podía hacer, ya no dependía de ella.
Atrapada en la histeria, avinagrada, siempre apurada sin tiempo para dedicarle a aquel hombre bueno que la reclamaba en la distancia y cada vez que él viajaba exponía su futuro en el trabajo, la veía cada vez más alejada y hasta le parecía ver en ella a otra persona. Se había convertido en una desconocida para él.  
No hubo boda, porque él se canso de esperar, en medio de aquella tragedia que le había ido quitando poco a poco a su mujer amada.
 Con el correr del tiempo la justicia fue archivando aquella investigación que no conducía a ningún lado, la causa fue durmiendo en algún lugar y ella deambulaba por los pasillos de los tribunales sin tener respuesta.
Se marchito su juventud y la soledad por haber perdido al hombre que amaba la sumergió en una inmensa tristeza que la llevo a la depresión. La casa cuidaba celosamente su patética existencia, prisionera de sus propios fantasmas, no pudo escapar de aquella encrucijada.
Quince años después de aquella mañana que ella abriera la puerta de su destino, en Europa, en un pequeño pueblo, una anciana lee una carta, lentamente toma un retrato, entonces, la siniestra mujer sonríe satisfecha, su plan macabro había tenido el éxito esperado
continuará

2 comentarios:

  1. ¡Cuánta intriga! Quiero saber quién esa anciana. No había visto que estabas publicando esta historia hasta que vi la quinta parte (no la leí, obviamente). Eso significa que tengo para entretenerme aunque espero poner al día pronto. Je, je.

    Saludos y comparto. ¡Feliz comienzo de semana!

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  2. ¿Quién es esa anciana? ¡Ay Dios! me vuelves a atrapar. Estoy intrigado y desconcertado. ¡Pobre joven!
    Espero el siguiente capítulo. Saludos y abrazos Estela me ha fascinado.

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